Un microsite (o micrositio, que viene a ser lo mismo) es una web más pequeña, pensada para un objetivo muy concreto. No es la típica página corporativa con mil secciones, sino algo mucho más enfocado. Por ejemplo, para lanzar un producto, apoyar una campaña puntual o captar leads en un segmento muy específico.
Lo habitual es que esté separado de la web principal de la marca, ya sea con un dominio propio o en un subdominio. Y aunque a veces se parece a una landing page, en realidad va un paso más allá: suele tener más contenido, más diseño, y permite jugar más con el mensaje.
En qué se diferencia un microsite de una web de toda la vida
Si tienes dudas, aquí va una tabla sencilla para verlo claro:
Característica | Web principal | Microsite o micrositio |
Finalidad | Presentar toda la información de la empresa | Promocionar algo muy concreto |
Contenido | Variado, general | Muy específico y centrado en un solo tema |
Dominio | midominio.com | dominioindependiente.com o subdominio |
Estructura | Compleja, con muchas secciones | Simple, directa y con pocas páginas |
Diseño | Sigue la imagen de marca | Puede ser distinto, más creativo |
Público objetivo | General, amplio | Muy segmentado |
Frecuencia de cambios | Suele actualizarse a menudo | Se crea para algo puntual y luego se deja tal cual |
Entonces, ¿un microsite es una web más pequeña?
Sí, pero no solo eso. Un micrositio no es simplemente una web con menos páginas. Es una herramienta con un enfoque muy claro. Lo bueno es que, al no tener mil cosas compitiendo por la atención del usuario, el mensaje llega más directo, algo fundamental en estrategias de SEO para pymes.
Y si se trabaja bien el SEO, un microsite también puede posicionar muy bien por palabras clave concretas, sin pisar el terreno de la web principal.
Para qué sirve un microsite: ventajas reales para tu marca
Un microsite (o micrositio, que al final es lo mismo) es una herramienta de marketing que puede darte muy buenos resultados si la usas con cabeza. No es una web más, es algo mucho más enfocado: va al grano, sin distracciones, y se centra en conseguir una acción concreta.
A diferencia de una web principal, que tiene que hablar de la empresa, servicios, blog, contacto y todo lo demás, un micrositio se dedica a una sola cosa. Y justo por eso funciona tan bien.
Ventajas claras de crear un microsite
1. El mensaje llega claro y sin ruido
Con un microsite puedes contar algo muy específico sin que el usuario se pierda por el camino. Nada de menús eternos ni enlaces a secciones que no vienen a cuento. Entras, ves de qué va la cosa y, si está bien hecho, acabas haciendo clic.
2. Puedes hablarle solo a quien te interesa
Un micrositio te permite adaptar el mensaje a un tipo de público muy concreto. Perfecto si vas a lanzar algo nuevo, si quieres probar una propuesta diferente o si necesitas dirigirte a un nicho muy específico.
3. Más libertad para crear sin romper nada
Como no estás limitado por la estructura o el diseño de la web principal, puedes darle al microsite un estilo propio. Cambiar colores, tipografías, tono… Todo lo que necesites para que encaje con la campaña. Sin miedo a cargarte la imagen de marca.
4. Buen aliado para el SEO si se hace bien
Un microsite bien trabajado puede lograr un excelente posicionamiento SEO en Google por búsquedas muy concretas. Eso sí, hay que currárselo: contenido útil, una estructura clara, palabras clave bien integradas y enlaces bien puestos. Si lo haces bien, suma mucho.
5. Ideal para campañas que tienen principio y final
Si estás preparando un evento, una promo puntual, un sorteo o el lanzamiento de un producto, un micrositio es la forma perfecta de concentrar toda la acción ahí. Lo creas, lo mueves, recoges resultados… y luego decides si lo mantienes o lo cierras.
Cuándo conviene crear un microsite y cuándo no
No siempre necesitas un microsite, pero hay momentos en los que encaja de maravilla. Lo importante es tener claro para qué lo quieres y si realmente te va a servir para conseguir resultados. No es cuestión de hacerlo “porque sí”.
Cuándo sí merece la pena montar un micrositio
Hay casos en los que un microsite funciona genial:
1. Vas a lanzar un producto o servicio nuevo
Si estás preparando un lanzamiento, un micrositio te permite darle todo el protagonismo sin mezclarlo con el resto de cosas de tu web. Puedes explicar bien los beneficios, mostrarlo con más detalle y enfocarte solo en eso.
2. Tienes una campaña con fecha de caducidad
Promos, sorteos, eventos, campañas publicitarias… Todo lo que empieza y acaba en un periodo corto de tiempo va perfecto en un microsite. Te da un espacio propio, limpio, sin ruido, donde centralizar todo.
3. Quieres dirigirte a un público muy concreto
Un micrositio te da libertad para adaptar el mensaje, el diseño y el tono a un perfil muy específico de usuario. Así puedes hablarle directamente, sin generalidades.
4. Estás probando algo nuevo
Si estás validando una idea, testando un concepto o simplemente quieres ver cómo responde la gente a algo distinto, un microsite es perfecto. Rápido, barato y sin comprometer tu web principal.
Cuándo no compensa hacer un microsite
No siempre es buena idea, y aquí tienes algunos motivos:
1. No tienes claro el objetivo
Si no sabes exactamente para qué quieres el micrositio, lo más probable es que acabe olvidado y sin resultados. Tiene que haber una intención clara detrás.
2. Puedes resolverlo dentro de tu propia web
Hay veces que con una landing bien trabajada o una sección nueva en tu web te basta y te sobra. Si no hay necesidad real de separarlo, no te líes.
3. No vas a dedicarle tiempo ni recursos
Un microsite necesita diseño, contenido, estrategia, promoción… y contar con un presupuesto de posicionamiento SEO adecuado para hacerlo bien.
Ejemplos reales de microsites bien pensados
- Spotify Wrapped: cada año lanzan un microsite personalizado para cada usuario con sus datos del año. Es viral, se comparte un montón y está totalmente separado de su web.
- Campañas de Coca-Cola: en verano, Navidad, concursos… crean micrositios específicos para cada campaña, centrados solo en una idea.
- Startups en fase de preventa: muchas marcas nuevas lanzan un microsite para validar el interés antes de hacer la web completa.
Cómo crear un microsite paso a paso (y no morir en el intento)
Crear un microsite no es cosa de otro mundo, pero si no lo haces con un poco de cabeza, es fácil que se quede a medias o no funcione como esperas. Aquí tienes una guía básica para montar un micrositio que cumpla su función y además tenga opciones reales de posicionar bien en Google.
1. Ten claro para qué lo haces
Lo primero, y más importante: ¿para qué necesitas este microsite? No es lo mismo si lo vas a usar para lanzar un producto, para captar leads, para una campaña puntual o para probar una idea nueva. Si no tienes claro el objetivo, todo lo demás va a ir cojeando.
2. Decide si vas con dominio propio o subdominio
Tienes dos formas de montar tu micrositio:
- Dominio propio (tipo nombrecampaña.com): da sensación de independencia y es buena opción si la acción va a tener mucho peso o visibilidad.
- Subdominio (tipo campaña.tumarca.com): más fácil de gestionar y mantener vinculado a tu marca si ya tienes una web funcionando.
Ambas opciones son válidas, solo hay que ver qué encaja mejor con lo que quieres conseguir.
3. Cuida mucho la experiencia de usuario
Un microsite no necesita ser complejo. De hecho, cuanto más simple y directo, mejor. Que el usuario entre, entienda de qué va la cosa y sepa qué tiene que hacer. Punto. Para eso:
- Usa un diseño claro, limpio y con sentido.
- Deja bien visibles los botones o llamadas a la acción.
- Asegúrate de que se ve perfecto en el móvil.
4. Escribe contenido que vaya al grano
No hace falta escribir la Biblia. Lo importante es que el contenido del micrositio sea útil, claro y enfocado al objetivo. Algunas claves:
- Titulares que se entiendan al vuelo.
- Textos cortos, pero con lo necesario para convencer.
- Buenas imágenes o vídeos que apoyen lo que estás contando.
- Llamadas a la acción claras y visibles.
Y, por supuesto, trabaja las palabras clave principales para que Google entienda de qué va el microsite y lo posicione.
5. No descuides la parte técnica
Aquí es donde la mayoría mete la pata. Aunque sea una web pequeñita, el micrositio tiene que funcionar bien. Ojo con esto:
- Que cargue rápido (esto es clave para SEO y para que la gente no se largue).
- URLs limpias, etiquetas bien puestas, títulos coherentes…
- Que se vea bien en móvil y sea accesible.
- Que puedas medir lo que pasa dentro con Google Analytics o similar.
6. Piensa en cómo lo vas a mover
El microsite no va a posicionar ni a recibir visitas por arte de magia. Hay que moverlo:
- Dale salida con una campaña de pago, redes sociales, email…
- Enlázalo desde tu web principal.
- Si puedes conseguir enlaces desde otros sitios, mejor todavía.
- Y sobre todo, mide: qué funciona, qué no, y ajusta.
SEO para microsites: cómo posicionar sin competir con tu web principal
Una de las dudas más típicas cuando montas un microsite es: “¿Y esto cómo lo posiciono sin pisar el SEO de mi web principal?”. Y tiene todo el sentido. La buena noticia es que, si lo haces bien, un micrositio puede ayudarte a ganar visibilidad sin restar protagonismo a tu web de siempre.
¿Un microsite puede posicionar en Google?
Sí, claro que puede. De hecho, muchas veces tiene ventaja: al centrarse en un solo tema y no tener tanto contenido compitiendo dentro, es más fácil que Google entienda de qué va y lo posicione bien.
Pero ojo, que sea pequeño no significa que no necesite SEO. Al revés: hay que mimarlo como cualquier otra web.
Cómo posicionar un micrositio sin pisarte con tu web
1. Elige palabras clave concretas y diferentes
No repitas las mismas keywords que ya trabajas en tu web principal. El microsite tiene que atacar otras búsquedas, más concretas o más relacionadas con la campaña o producto que estás promocionando.
Por ejemplo, si en tu web estás posicionando “gafas de sol”, en el micrositio puedes ir a por algo más específico como “gafas de sol polarizadas para deporte”.
2. Cuida la estructura del contenido
Aunque tenga pocas páginas, el micrositio tiene que estar bien montado:
- Títulos claros (H1, H2, etc.)
- URLs limpias y con sentido
- Metadescripciones atractivas
- Imágenes con nombres descriptivos y texto alternativo
Todo esto ayuda a que Google entienda bien el contenido del microsite y lo posicione donde toca.
3. No dupliques contenidos ni compitas contigo mismo
Evita hablar exactamente de lo mismo que ya cuentas en tu web principal. Si empiezas a competir contigo mismo por las mismas palabras clave, vas a terminar perjudicando ambas.
Lo ideal es que el micrositio aporte algo nuevo o lo enfoque desde otro ángulo. Que sume, no que reste.
4. Enlaza tu microsite desde tu web principal (y viceversa)
Esto ayuda a que Google entienda que están relacionados y, además, puede pasar algo de autoridad de una web a otra. Eso sí, que el enlace tenga sentido. No pongas un banner gigante porque sí.
Y si desde el microsite enlazas a la web principal, mejor todavía.
5. Si puedes conseguir enlaces externos, mejor
Aunque el microsite sea algo puntual, si logras que otros sitios de confianza lo enlacen, tendrás más posibilidades de posicionar. Puedes tirar de prensa, redes, colaboraciones… según el tipo de campaña que estés moviendo.
Errores típicos al crear un microsite (y cómo evitarlos)
Montar un microsite puede ser un acierto… o un caos, si no se hace con cabeza. Hay errores que se repiten mucho y que, si los ves venir, te los puedes ahorrar. Aquí van los fallos más comunes al crear un micrositio y cómo evitarlos sin dramas.
Crear un microsite sin tener claro para qué sirve
Este es el clásico: se lanza un micrositio porque “hay que hacerlo”, pero nadie tiene muy claro el objetivo. Resultado: ni posiciona, ni convierte, ni sirve para nada.
La clave: antes de ponerte a diseñar nada, ten claro qué quieres conseguir. ¿Es para vender algo? ¿Captar leads? ¿Apoyar una campaña? Si no tienes una respuesta clara, no empieces.
Copiar contenido de tu web principal
Otro error muy habitual: coger textos de tu web corporativa y pegarlos en el microsite para rellenar. Mala idea. Google ve contenido duplicado y puede penalizarte, además de que no estás aportando nada nuevo.
Lo ideal: crea contenido original y adaptado al enfoque del micrositio. Más corto, más directo si hace falta, pero útil y específico.
Pasar del diseño y la experiencia de usuario
Aunque el microsite sea algo puntual, no puede parecer hecho con prisas: lo ideal es apostar por un buen diseño web SEO que combine estética con posicionamiento. Si la gente entra y no entiende nada o no encuentra lo que busca, se va al segundo.
Consejo: hazlo visualmente limpio, fácil de usar y 100 % adaptado a móvil. No hace falta que sea súper complejo, pero sí funcional.
No trabajar el SEO
Hay quien piensa que, como es algo temporal, el microsite no necesita SEO. Error. Si no lo optimizas, no lo verá nadie salvo que le mandes tráfico a cañón.
Solución: trabaja bien los títulos, las URLs, las imágenes y las palabras clave. Es un micrositio, sí, pero sigue siendo una web.
No medir nada
Lanzas el microsite y… lo dejas ahí. Sin saber si funciona, si la gente entra, si convierte. Así no hay forma de mejorar ni de saber si ha merecido la pena.
Lo suyo: ponle Google Analytics o lo que uses, marca objetivos claros y revisa qué está pasando. Si ves que algo no funciona, cámbialo sin miedo.
Conclusión
La respuesta corta: sí, pero no siempre. Un microsite puede ser una herramienta muy potente si se usa con cabeza. Sirve para centrar el mensaje, conectar con un público muy concreto y posicionarte por búsquedas específicas sin competir con tu web principal. Pero, como todo en marketing, tiene sentido si hay una estrategia detrás.
Cuándo sí tiene sentido crear un micrositio
- Si estás lanzando un producto o servicio nuevo.
- Cuando haces una campaña con principio y final.
- Si necesitas hablarle a un público muy específico.
- Si quieres posicionarte por keywords muy concretas sin tocar tu web.
- Para testear ideas o hacer algo diferente sin romper nada.
Cuándo no lo recomendamos
- Si no tienes claro el objetivo del microsite.
- Si no vas a invertir tiempo ni recursos en hacerlo bien.
- Si lo que quieres comunicar encaja perfectamente dentro de tu web actual.
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